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| La intelectual Blanchot del Colegio de México desarrollando el tema de la economía en el empoderamiento de la mujer. |
La construcción de los conventos, la vida religiosa consagrada de eminentes humanistas salvaterrenses y la creación de variadas fiestas patronales en los diferentes días del calendario litúrgico, han creado una sociedad católica que inunda todas las facetas de la vida social de la ciudad con imágenes sacras, peregrinaciones, asociaciones de laicos y educación confesional.
Pero también, la llegada de la revolución industrial y la instalación de la fábrica textil "La Reforma", incorporó otras formas de pensar definidas como filosofía liberal. La mentalidad del pragmatismo capitalista convive, desde entonces, con la mentalidad del sentido de vida místico, y son parte de las redes sociales de la ciudad.
La diversidad de filosofías enriquece las oportunidades de desarrollo del pensamiento, de la cultura, del trabajo y de la vida pública municipal. Antonio Caso lo describió en 1938 para definir el ser del estado de Guanajuato: "López Velarde, el gran poeta zacatecano dijo una vez: "Católico de Pedro el ermitaño y Jacobino de época terciaria..." Eso es Guanajuato en al historia de la República! Antítesis de "derechas" e "izquierdas", como se dice hoy... Junto al "mocho" el "Chinaco". Y así es Salvatierra.
Los dos iconos de México: la veneración a la Virgen María y la promoción de las leyes de Reforma comparten el ser del salvaterrense. El edificio de una fábrica textil cuyo propietario homenajea la Reforma política de Benito Juárez en 1872, es el mismo espacio donde sus obreros nombran a la Virgen del Rosario como Patrona de la fábrica y Reina del trabajo textil en 1945.
La pluralidad de creencias, la diversidad de pensamientos, la riqueza de corrientes filosóficas es parte de la convivencia pacífica de la ciudad, gracias a una delicada prudencia que hoy se denomina tolerancia.
Los gobiernos municipales de las dos últimas décadas son la expresión de la tolerancia local, gracias a la cual han alcanzado a llegar al gobierno de Salvatierra distintos y opuestos grupos sociales que integraron la representación popular del Ayuntamiento mediante diferentes partidos. Cada Cabildo en su periodo tri anual desarrolló un estilo propio de vincularse con la sociedad, sin menoscabo de que las criticas ciudadanas y partidistas estuvieran al día.
El periodo del gobierno municipal actual tiene un signo de cambio que está marcado por los tiempos que vivimos en el mundo, el derecho de las mujeres a participar en condiciones de igualdad en todas las facetas del quehacer humano. Una mujer Presidenta dirige las riendas de la administración municipal, representando un cambio que contiene una inagotable fuente de posibilidades insospechadas para el desarrollo local. Estamos ante un giro de 180 grados, ante una esperanza mundial de promoción de la igualdad entre géneros.
El objetivo de todo gobierno es promover el desarrollo humano, enriquecer la vida social solidaria, fomentar la participación ciudadana en los asuntos públicos, fortalecer la educación en los valores propios comunitarios, darle seguridad a la vida de los habitantes y atraer inversiones para el empleo. Esta tarea, que es parte de los métodos de la administración pública, se logra mediante la unidad y diversidad de la participación social en los temas de impacto general, con el liderazgo, en esta ocasión, de la Presidenta, de una mujer salvaterrense a cargo del ejecutivo.
Este episodio histórico, de cambio e innovación, debemos verlo como una oportunidad para el desarrollo municipal, tal como vivimos los agitados cambios municipales en el periodo de Maximiliano, cuando pasamos del Segundo Imperio Mexicano a la República Restaurada que emitió un decreto de confiscación para quienes habían colaborado con el gobierno del Imperio, pero dejando a salvo todos los demás derechos del ciudadano. El decreto abrió una coyuntura social y económica que el principal Empresario industrial textil de Salvatierra, aprovechó para hacer crecer el capital, comprando las fábricas confiscadas a los mexicanos aliados al Imperio.
Estas alianzas condujeron a que los liberales salvaterrenses hicieran lo que nadie más hizo en el estado de Guanajuato, mostrar un gran reconocimiento a la obra de Benito Juárez realizando la imposición del nombre emblemático a la fábrica textil, llamándola "La Reforma".
Por ello, la pregunta actual ¿Cómo van aprovechar las mujeres esta coyuntura de cambio social?.
Veamos una respuesta a partir de la publicación del boletín de la Administración Municipal de este mes de diciembre denominado "Obras y Acciones Que Mejoran El Nivel de tu Comunidad".
pero resulta que el boletín municipal nada dice de la equidad de género en los programas realizados, no informa de que haya habido igualdad en la cantidad de beneficiarios mujeres y hombres.
Las jefaturas de familia han cambiado en estos tiempos su composición, muy bien se puede especificar en las obras y acciones cuantas familias beneficiadas tienen jefatura femenina o masculina. Tanto en pavimentaciones, mejora de la vivienda, techo firme, activos productivos, apoyo a la educación, capacitación empresarial, etc.
Si al menos en esta enorme desigualdad de género que ha imperado en las administraciones municipales se percibe un aumento en la equidad de género, habrá sido un gobierno que cumplió la expectativa de tantas mujeres marginadas que votaron por la opción de un cambio de género en el gobierno municipal de Salvatierra.
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