Estado y ciudadania por Jesús Guisa y Azevedo
Comentario por Pascual Zárate Avila
Comentario:
El pensamiento de Estado debe ser parte de la imaginación de los representantes populares: deben de olvidarse de posiciones partidistas en el cabildo, de amigismos y de nepotismos familiares.
El individuo debe opinar desde su posición particular y el jefe del Estado sopesar la razón de su deber de proveer al particular, sin excluirlo.
Ejercicios como el realizado en esta tarea de comentarios, deben valorarse a la luz del interés al que nos mueve la acción eficaz del Estado en su nivel municial. Es indudable que hablo desde la perspectiva del legado cultural de la comunidad intelectual forjada en la ciudad a lo largo de tres siglos de historia. Pensar lo que se escribe es tarea de los representantes populares para fundamentar la política municipal.
6.- El jefe del Estado sólo es amigo del Estado
El Estado y quien lo representa en cualquiera de sus tres niveles de gobierno, es el negocio que más ocupa y que más importa a los ciudadanos. Autoridad de derecho y gobierno para todos y de todo. Un gobierno que sea una autoridad universal, que en todo debe estar y de todo se debe ocupar.
El gobernante debe asumir en razón de estado: proveer de bienestar, progreso, previsión, cálculo, forjador de cosas nuevas y movido por la fe en los destinos humanos.
Sin embargo la máquina del Estado puede ser eficaz que triture al individuo. La unidad es la variedad.
El Estado sin escritores no puede nada. Los escritores hacen ver la vastedad de la herencia e inunda de luz los horizontes de lo porvenir. La política requiere de un fundamento intelectual. Jesús Guisa, año de 1956.
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