La definición más objetiva del gobierno municipal de Salvatierra es la de Gobierno Autista, verificada por la declaración de la presidenta Guadalupe Nava, quien dice "Y por qué yo", refiriendose al cierre del hotel Isabel, donde no hizo un papel mediador o regulatorio del proceso económico que sepultó un proyecto de inversión de largo plazo en la jurisdicción territorial que gobierna.
El Editor del blog Arcadia salvaterrense, que por más de un año promovió al hotel Isabel con un anuncio, expresa su más catogórica condena al descuido y abandono, en el que los dejaron a su suerte la dirección de turismo, la de desarrollo económico y el pleno del cabildo municipal, tanto al respetable inversionista surgido de la economía de la migración Juan Santoyo, como a los trabajadores hoy desempleos y que tiene ya postradas en la desesperanza a veinte familias salvaterrenses.
Las riñas partidistas existentes en el cabildo, les está impidiendo que vean los problemas por los que atraviesan en este momento los agentes económicos de la ciudad, con la consecuente omisión de cualquier medida de apoyo, como sucedió en el caso de su omisión en el obligado deber de intervenir para preservar el proyecto turístico de largo plazo, ahora ya inexistente.
Una irreparable pérdida de confianza recorre Moulin, Illinois, y el desastre económico se avecina para Salvatierra, si el cabildo continúa en su ineficiencia para lograr acuerdos políticos a los que están obligados los doce integrantes del ayuntamiento, responsabilidad que es por igual para los cuatro partidos políticos con los que se integra la representación popular.
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