La trasmisión de los valores generacionales que se adquirían conociendo las historias de familia, en las tardes sosegadas escuchando a las tías, padres o de los amigos visitantes de otras épocas, en estos tiempos esa tradición esta perdida. La memoria familiar y colectiva ha dejado su lugar al facebook de las fotos del momento y el chat de las experiencias recientes. Este fenómeno de comunicación digital debe ser orientado hacia la reflexión sobre temas que nos proporcionen un conocimiento de nuestra identidad comunitaria, de nuestro origen común y del legado cultural familiar y municipal.
La escuela enseña temas nacionales y conocimientos abstractos de teorías universales, no informa sobre el entorno local, nada dice de la composición de la geografía humana, de la historia social, económica y artística local. Por ello los municipios deben dar servicios educativos mediante metodologías informales y no formales.
En Salvatierra hemos establecido acciones de educación no formal e informal que enseñan acerca del patrimonio cultural de los edificios, como los recorridos culturales al centro histórico y al edificio de la fábrica textil "Reforma y Carolina, 1845"; apoyado a programas radiofónicos culturales sobre los temas de la tradición de las fiestas patronales, promovido la proyección de películas realizadas por salvaterrenses en restaurantes que cuentan con equipo digital de proyección; y publicado en Internet el blog de Arcadia Salvaterrense sobre estudios para el conocimiento de la identidad del municipio. A este objetivo se le denomina en la teoría de la pedagogía social Ciudad Educadora.
Una experiencia de ciudad educadora reciente, me ha dejado un grato recuerdo de lo ocurrido. El miércoles, los estudiantes de tercer semestre de la preparatoria Leopoldo Salgado Tovar, fueron invitados para que, quienes tuvieran curiosidad, asistieran en la mañana al restaurante El Patio a la proyección de la película "Hermenegildo Bustos", realizada por el salvaterrense Rafael Castanedo Aceves, quien en la infancia compartiera pupitres en la escuela primaria con el profesor Tarsicio Salgado Tovar, en el colegio Morelos, teniendo como maestro a Francisco Bombela, de imperecedera memoria.
El empresario del ramo turístico, Arturo Moreno, con mucho sentido de su deber ético con la ciudad, patrocinó la proyección empleando las seis televisiones, dos pantallas, mobiliario confortable, sonido estereofónico, micrófono inalámbrico, y conección por Internet a este blog.
Paulino Castanedo Aceves, proporcionó para ese evento los datos biográficos de Rafael Castanedo, las películas que guarda como archivo familiar y estuvo presente en la proyección para motivar a los estudiantes a luchar por sus sueños.
El regidor Agustín Rosillo financió el costo de la digitalización de la película, cuyo contenido estaba en formato de video VHS, trabajo que realizó Ismael Zamora.
Asistió como visor del evento cultural llevado a cabo en un recinto de un socio de la Asociación de prestadores de servicios turísticos de Salvatierra, el secretario Raúl Medina.
La proyección fue atendida por los estudiantes en un ambiente relajado, sin presión disciplinaria como lo recomienda la teoría, y además la amplitud del espacio, la abundancia de aparatos y el volúmen del sonido permitía la conversación de pequeños grupos sin perturvar a los demás que estaban concentrados en seguir la narración visual de la película.
Cuando fue la sesión de preguntas, efectivamente los asistentes señalaron la trama de la historia de Hermenegildo y Joaquina, su esposa. Como parte del programa de educación informal, Paulino Castanedo contó la biografía de Rafael Castanedo y la atención fue muy educada, en perfecto silencio. Estas acciones de aprendizaje social, de respeto a los mayores y de interés por lo realizado en el pasado por los nacidos en la ciudad, van conformando la identidad cultural de la comunidad municipal.
Al final se les mostró las fotografías de Rafael Castanedo, de su papá Luis y de su mamá Carmelita, así como vistas del lugar de trabajo de don Luis Castanedo en 1925: la hacienda de San José del Carmen; todo ello através de Internet, conectando la página de Arcadia Salvaterrense para que fuera vista en la televisiones y pantallas.
Me quedo con una grata impresión de amenidad, y muy entusiasmado por el interés de los participantes en realizar su papel, que contagiaron al grupo con alto grado de motivación, creando un ambiente de trato familiar, como se hacía en el siglo pasado, cuando se formaba el sentido de pertenencia a un grupo familiar, a un grupo escolar o a un equipo deportivo platicando las experiencias antiguas y nuevas.
El proyecto es continuar con estas jornadas de identidad cultural, para crear en el futuro una formal ciudad educadora y una sociedad del conocimiento en Salvatierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario